ANDRÉS MARCO

viernes, 15 de mayo de 2020

SESENTA DÍAS ENCERRADO EN CASA

Sesenta días encerrado en casa
añorando besos,  unas miradas,
más abrazos, una sonrisa franca.

Yo no quiero sentarme en terrazas,
sí en bancos de cualquier plaza
y compartir palabras y palabras
con personas de almas blancas
sin una distancia mínima obligada.

Regresar a las  sendas de la montaña,
y contemplar las olas en la playa
y el horizonte hasta donde alcanza
y ver en tus ojos mi alma reflejada.