ANDRÉS MARCO

martes, 24 de septiembre de 2013

CON CASI 61 AÑOS

Con casi 61 años cumplidos a cuestas
no estoy, la verdad, para grandes cosas,
no son aquellas, ni las otras o éstas
pero no me conformo con las sobras.
Ya no deseo hacer grandes apuestas
y mucho menos iniciar grandes gestas
incluso en ocasiones me aburren las fiestas
ahora tan sólo busco situaciones ciertas.
No quiero dominarlo todo, me vale un poco,
y que nadie intente sustraerme lo que toco,
a mi edad no acepto engaños ni sonrojos
sólo pido sinceridad cuando miro a los ojos.

jueves, 19 de septiembre de 2013

SI SOMOS LIBRES

Si somos libres de hacer lo que nos corresponde
entonces libertad sí, pero me pregunto ¿dónde?.
Al final resultará que nada más somos dueños,
aunque no nos guste reconocerlo, de nuestros sueños
y todos sabemos que los sueños son sólo quimeras.
No hay peor esclavo que aquel que anhela cadenas
y que jamás se plantea que un día deberá romperlas
si quiere ser libre. De otro modo siempre pagará condena
y precisará de algo más duro que la ducha de agua fría
para percatarse que nos hacemos libres en el día a día
porque somos libres de decidir si queremos ser libres
pero no nos engañemos: sólo siendo libres seremos felices.

domingo, 15 de septiembre de 2013

PRÓXIMO A MI 61 CUMPLEAÑOS

Próximo a mi 61 cumpleaños
confieso me inquieta llegar a la fecha
a pesar de que sigo fuerte en la brecha
y siento que aún me restan redaños.
Todo hasta que un día acabe mi camino
sin que haya en eso trampas ni engaño,
soy consciente que no hay peor amaño
que intentar jugársela al destino,
aunque espero que ocurra muy lejos.
A quienes se quedan yo les dejo
mi sincera gratitud de haberlos conocido
y les pido que no me posterguen al olvido.

jueves, 12 de septiembre de 2013

DIGO EN EL CARTEL "COMPRO ORO"

Digo en el cartel:"Compro oro",
con el hambre de algunos yo especulo,
a partir de su miseria yo me forro,
a los pobres, que les den por el culo.
Yo no hurto nada a nadie
y muchos menos les robo,
es mi negocio y mi arte
sólo me aprovecho de los bobos.
A costa de necesitados y menesterosos
yo cada día me hago más rico,
a nadie engaño ni timo, sólo pongo
la zanahoria delante del borrico.

martes, 3 de septiembre de 2013

NOS LLENAMOS LA BOCA

Nos llenamos la boca de palabras
grandilocuentes, normalmente hueras,
palabras a veces demasiado nuevas
y groseras que jamás significan nada.
Abruman en exceso los silencios callados
especialmente si no los controlamos,
y ante su insostenible presión hablamos,
porque tanta tensión no la soportamos.
Qué difícil resulta usar palabras sencillas,
que se entiendan, nada más las precisas,
esas capaces de moverse como avecillas:
revolotean y las sentimos como pura brisa.