Tiempo habrá para abrir la mochila
y sacar cuantas cosas hay dentro,
seguro que conformarán una gran
pila,
a lo lardo de mi vida son muchos
recuerdos
los que sin darte cuenta has ido
introduciendo
así llega el día en el que la mochila rebosa,
todo cabía, también eso de lo que me arrepiento,
y
que cuando voy llegando al final pesa y agota,
pero intuyo, vamos sé, que no toca abrirla ahora
mientras sienta que la energía aún
no me abandona,
tengo tiempo de
sobras para abordar nuevos retos
que me permitan abrir la mochila e
irlos metiendo.